lunes, 21 de julio de 2014

Hay vida (montañera) más allá de Pirineos/Alpes

Potes desde la Cruz de la Viorna


Camino de Cabaña Verónica
Cabaña Veronica (mini refugio construido con desguace de portaviones de la II G. M.)

Vega de Liordes
Collado de Remona

Padierna (pueblo abandonado)

Collado de Horcados Rojos. Urriellu al fondo

Ferrata de Los Llanos/Camaleño justo antes del puente tibetano (foto cortesía de J. Vinagre/Guiatrek)


A principios de mes acompañé a un grupo del GEM a Picos de Europa. Montañeros ya no adolescentes pero con envidiable resistencia y ganas de divertirse. Aunque el nivel de las rutas era moderado, varios días superamos los mil metros de desnivel acumulado, por caminos/pistas en buen estado pero pendientes fuertecitas. Otros días visitamos iglesias románicas y pueblos abandonados de la zona (alrededores de Potes, en la vertiente sur del macizo). Como guinda, cuatro culos inquietos nos apuntamos a una ferrata (Los Llanos/Camaleño), corta pero muy vertical y con un puente tibetano aéreo y espectacular (yo lo dejé para mi próxima visita ;-))

Para los que aún no conoceis Picos, tiene poco que envidiar a Pirineos. Se ha creado ya una ruta tipo Carros de Foc (Anillo de Picos), dividida en tres tramos y con muchas opciones de incorporación y duración. Esta era mi tercera visita al macizo y no me importaría organizar una salida en veranos próximos. Conozco una ruta espectacular de dos días con noche junto al Urriellu/Naranjo de Bulnes. Otra durísima (1700 mts desnivel acumulado) que tampoco me importaría repetir. De las que he hecho esta semana, la Vega de Liordes y los Balcones de Tresviso me encantaron. Más varias que no he podido hacer aún y les tengo muchas ganas. Y si alguno ha salivado con la ferrata, tengo contactos para alquilar equipo. Podemos pensarlo/hablarlo con calma. Saludos. Fernando S-C 

2 comentarios:

pmmp dijo...

Picos de Europa me encanta. Y hay mucha roña por allí jeje.

Fernando A dijo...

Lo sé bien. Roña sin carritx o aritja pero roña de primera. En viajes anteriores me enmarroné más de una vez por pasos aéreos o niebla traicionera. Y no por eso disminuyen mis ganas de volver. A ver cuando logramos montar una escapada!